Sunday, July 17, 2011

Cuyacuat...


Esta historia se narra principalmente en el municipio de Izalco, en el Departamento de Sonsonate que es donde sale por las noches una especie de animal mitológico de gran tamaño, mitad culebra en el extremo inferior y mitad cerdo en el superior que anuncia la lluvia principalmente cuando será un temporal. Según los testimonios, no solo aparece una Cuyancúa sino a veces lo hacen en grupo.

Al visitar Atecozol puedes encontrar una imagen en piedra de este fantástico animal por el área de la piscina familiar donde están las cascadas.
La Cuyancúa… Cuyancuat o la serpiente emplumada de la mitología Maya.

Según cuentan los lugareños, en las horas del anochecer, se escucha hacia el rumbo norte de la población de Izalco, o más a lo lejos un graznido o chillido tenebroso seguido de fuertes turbulencias bajo la tierra, que sumía en pánico a las familias de los barrios de ladinos e indígenas. Se trata de la Cuyancúa.
Por lo cual, los lugareños se encerraban a tempranas horas en sus hogares, estos se escucha principalmente en los alrededores de los ríos y quebradas, dicho animal se arrastra recorriendo la zona en busca de alimento se esconde en las acequias de Izalco, Caluco, Nahuilingo y San Ramón. Quienes la oyen se encomiendan a Dios, se ponen en actitud beatífica y, con los ojos cerrados, piensan en lo que anuncia el animal temporales, fuertes tormentas, inundaciones…

Cuando alguien de fuera de Izalco inquiere acerca de ese ser que origina tan terribles sonidos, las personas del lugar le refieren que la Cuyancúa es una enorme culebra que vive en los alrededores desde hace muchos años, tantos que los relatos de sus existencia se remontan a los tiempos de los abuelos de los abuelos y mas...  

Que personas que trasnochaban aseguraban haberse visto de frente al temido animal, lo cual les produjo tal impacto que cayeron desmayados y privados del habla. Tiempo después, al salir del trance originado por el miedo, esos protagonistas de la leyenda viviente narrarían sus experiencias a sus familiares y amigos, en los que brindarían detalles de esa visión legendaria, de esa serpiente en que se funden el misterio y el espanto.


Para quien se anime a buscarla, la Cuyancúa se mantiene en los alrededores del balneario Atecozol. Repta por las orillas de los riachuelos, se enrolla en los árboles y desaparece de la vista humana por algún tiempo. Poco después se le oye por Nahuilingo, se desliza por los ríos va a asustar a las lavanderas del Río Grande. Vuelve y se escucha en Caluco o San Ramón...

Otra parte de la leyenda, asegura que la Cuyancúa hace que brote agua de la parte de tierra en donde escarbó para echarse. De allí mana un agua limpia y fresca, que se puede beber sin ningún riesgo por eso es que en los municipios que frecuenta existen tan hermosas vertientes...



De acuerdo al libro Mitos y Leyendas de los Pipiles de Izalco de L. Shultze Jena, es también un ser mitológico que tiene cierto dominio sobre las aguas de los ríos y la lluvia...

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